A ello hay que sumarle los dispositivos con los que cuentan Protección Civil, Policía Local y el personal de Cruz Roja
La Feria de Málaga 2023 volverá a ser cardioprotegida. Un total de 15 desfibriladores se distribuyen en diferentes casetas del Real de manera fija. A ello hay que sumarle los aparatos de los que disponen los agentes de la Policía Local, Protección Civil o los trabajadores de la Cruz Roja que estarán operativos durante la celebración de la semana grande.
Este miércoles, en la caseta de la Federación de Peñas, se celebrará un curso para el manejo de los desfibriladores. Un uso adecuado de estos aparatos es clave para poder salvar una vida ante una muerte súbita. La parada cardíaca es una patología frecuente. En España ocurren más de 30.000 muertes súbitas al año. Las posibilidades de sobrevivir a una parada cardiaca fuera de los hospitales oscila entre el 5% y el 10%.
Cada segundo cuenta. La reanimación debe empezarse de forma precoz. Por cada minuto que pasa, las oportunidades de sobrevivir disminuyen un 10%. Para mejorar el pronóstico y la atención a la parada cardiaca hay definidas una serie de actuaciones que son vitales y forman parte de lo que se ha definido como cadena de supervivencia. Lo más importante es el comienzo de comprensiones torácicas y el poder disponer de un desfibrilador.
En el Real, estos aparatos se distribuirán en las siguientes casetas: Casa de Álora, Peña El Bastón, Peña Cazadores Los Mimbrales, Peña Cortijo de Torre, La Alcazaba, Peña La Paz, Asociación Cultural Litoral, El Portón, Peña Santa Cristina, Tiro Pichón, La Rebotica, Caseta Municipal del Flamenco y la Copla, El Renge y Caseta Municipal de Protocolo.
El curso para el uso de los desfibriladores serán impartidos por Expaumi, una asociación malagueño que aglutina a profesionales sanitarios que se dedican al trabajo asistencial, bien en el ámbito de la comunidad o bien en el hospitalario.